El valetudinario Atos El grupo tendrá una semana importante con la presentación hoy de su marco de refinanciación a sus acreedores. El grupo está lastrado por una deuda de 4.600 millones de euros, de los que 3.650 millones deben ser reembolsados ​​o refinanciados a finales de 2025. Además, no ha conseguido completar con éxito las desinversiones de actividades: Fundaciones tecnológicas para Daniel Kretinsky Y BDS a AirbusUn cóctel que abre el camino a las ambiciones de varios actores de hacerse con la totalidad o parte de las actividades del SSII.

Índice
  1. OnePoint recibe el apoyo de Walter Butler
  2. El Estado está considerando diferentes opciones

OnePoint recibe el apoyo de Walter Butler

El primero en salir es OnePoint de David Layani, que acaba de recibir oportunamente el apoyo del fondo Butler Industries, fundado por Walter Butler, para la conquista de Atos. El empresario franco-brasileño es especialista en rescate de empresas y ha invertido en varias empresas de informática como Osiatis O Nextira UnoPero también en otras actividades como Paradis Latin o el pastelero Pierre Hermé. Por ello, estará presente en el consorcio (que integra la estadounidense Carlyle) para presentar una oferta de adquisición sobre el conjunto de Atos. Una forma de mostrar su fuerza frente a Daniel Kretinsky, que también querría comprar la totalidad de la empresa de servicios informáticos.

En un comunicado de prensaOnePoint confirma que esta oferta "se presentará al Consejo de Administración a finales de abril". David Layani va a contracorriente en comparación con otros pretendientes que solo apuntan a ciertas partes de la ESN. desear "Poner fin de inmediato a cualquier proyecto de transferencia, preservando la integridad de los activos, para construir un Nuevo AtosOne que comience con buen pie". Una estrategia ambiciosa, pero que hasta entonces el Consejo de Administración de Atos había recibido con frialdad.

El Estado está considerando diferentes opciones

En esta guerra de comunicación, otro actor, y no el menos importante, se mueve entre bastidores: el Estado. A través de la voz del ministro de Economía y Finanzas, recordó que buscaba "una solución nacional para proteger las actividades estratégicas", en particular la ciberseguridad y la superinformática. Según BFM, el Estado está estudiando diferentes opciones: participación directa a través de la Agencia Estatal de Participación, una inversión minoritaria de BPIfrance asociada a un industrial o impulsar a una empresa o consorcio para que se posicione.

En esta última opción, Dassault Aviation estudiaría el dossier BDS. Pero, según nuestro colega, el constructor aeronáutico no estaría interesado en todos los activos de esta división. Su interés se centra en los superordenadores que se utilizan en particular en la simulación nuclear, pero también en los contratos con Defensa. También podría poner la mira en la actividad Mission Critical System para los aviones Rafale. La parte de la ciberseguridad sigue siendo la misma. Thales no desea adquirir, ya que compró Imperva por 3.600 millones de dólaresEl Estado podría entonces ver con buenos ojos la formación de un consorcio en torno a BDS que reúna a varias empresas (Airbus, Dassault Aviation, Thales, OVH) para proteger los superordenadores. Aunque el interés nacional y estratégico prevalezca, el gobierno tendrá dificultades para gestionar este grupo con sus diferentes estrategias industriales.