Se trata de una situación sin precedentes para Samsung Electronics. El fabricante surcoreano de semiconductores y productos electrónicos de consumo y B2B, creado hace más de 50 años, se encuentra bajo la amenaza del primer ataque de su historia. Según AFP, Uno de los principales sindicatos del grupo, el Sindicato Nacional de Samsung Electronics (NSEU), pidió el miércoles a los empleados que presionen a la dirección para obtener mejoras salariales y un día libre adicional. Ante el estancamiento de las negociaciones, el organismo ha pedido a todos sus miembros que utilicen sus vacaciones pagadas del 7 de junio para parar el trabajo y no ha descartado continuar con una huelga a mayor escala.

El sindicato afirma que cuenta con unos 28.000 afiliados, lo que representa más de una quinta parte de la plantilla total de la empresa. "Ya no aguantamos la persecución de los sindicatos. Declaramos una huelga ante la negligencia de la empresa hacia los trabajadores", declaró un representante del sindicato en una rueda de prensa transmitida en directo, según informó AFP.

Un impacto en el suministro de componentes

La dirección de Samsung Electronics ha estado en conversaciones con el sindicato desde principios de este año sobre los salarios, pero hasta ahora las dos partes no han logrado llegar a un acuerdo. La empresa afirma que seguirá negociando. Los analistas han advertido de que una huelga a gran escala podría afectar a la fabricación de chips de la empresa y afectar a las cadenas de suministro de productos electrónicos globales, que ya se han visto afectadas durante la crisis de la COVID-19.