Es una historia interminable. El mainframe sigue estando en el centro de la actividad de grandes empresas y organizaciones públicas de todo el mundo y, aunque muchos de ellos migran aplicaciones de estas plataformas durante los proyectos de modernización, la desaparición de los grandes sistemas no es para mañana. Según un estudio realizado por la firma Coleman Parkes para Kyndryl (la empresa nacida de la escisión de los servicios de infraestructura de IBM en 2021), “los mainframes siguen siendo uno de los pilares tecnológicos de la economía global. Permiten a empresas y gobiernos de todo el mundo ejecutar aplicaciones de misión crítica mientras procesan cantidades masivas de datos. » La plataforma es especialmente apreciada por su seguridad (citada por el 68% de los usuarios), su fiabilidad (60%) y su rendimiento (55%).

De facto, entre los 500 usuarios de mainframe entrevistados como parte de este estudio, sólo dos planean abandonar completamente esta plataforma. Pero tengamos en cuenta que casi todas las empresas y administraciones encuestadas (precisamente el 95%) migran al menos determinadas aplicaciones fuera de estas infraestructuras. Y estos planes de salida de mainframe no son anecdóticos, ya que afectan en promedio al 37% de los activos de aplicaciones alojados en sistemas grandes.

Un proyecto costoso con riesgos importantes

Las empresas que optan por migrar determinadas aplicaciones fuera del mainframe citan tres ventajas clave de este enfoque: una mejora en el tiempo de comercialización (51%), un aumento del rendimiento (47%) y una aceleración de la innovación (44%). “Los mainframes tienen la capacidad de gestionar y procesar enormes cantidades de datos financieros. Por tanto, no abandonaremos esta arquitectura. Pero trasladar algunas aplicaciones no críticas a la nube nos ha ayudado a agilizar el flujo de trabajo a la hora de capturar datos, almacenarlos e interpretarlos”, explica el CTO de una empresa de servicios financieros, por ejemplo. de América Latina.

En promedio, los proyectos de modernización de aplicaciones mainframe - ya sea una actualización sin cambio de plataforma, una integración con sistemas externos o una migración - cuestan el 3,9% del presupuesto de TI de las organizaciones interesadas y duran 24 meses. Las empresas esperan un ahorro promedio de 25 millones de dólares. Y estos proyectos conllevan una cierta cantidad de riesgos. Así, las empresas que se han embarcado en una migración de una o más aplicaciones fuera de la plataforma están preocupadas por la seguridad (citada por el 56% de ellas), por los posibles desvíos presupuestarios (46%) y por las complejidades del proyecto y su impacto en la planificación. Todos estos son riesgos que aún deben controlarse, porque el 86% de los encuestados aún no han completado su proyecto de modernización de aplicaciones de mainframe. El 30% de las empresas y administraciones encuestadas se encuentran incluso en el inicio de esta operación.