sombrero rojo Red Hat anunció ayer que Linux Math Library (libm.so glibc), un componente central del sistema operativo para vehículos de Red Hat, ha obtenido la certificación ISO 26262 ASIL-B de Exida. ISO 26262 es un estándar internacional para la seguridad funcional de los sistemas eléctricos y/o electrónicos en vehículos de carretera. La empresa internacional menos conocida Exida es líder mundial en certificación de seguridad funcional y ciberseguridad. En concreto, Exida proporciona certificaciones, servicios y herramientas para la seguridad funcional, la gestión de alarmas y la ciberseguridad de los sistemas de automatización. La colaboración de Red Hat con Exida marca un hito importante. Aunque poca gente lo sepa, Linux está desempeñando un papel cada vez más importante en la industria del automóvil. De hecho, todos los vehículos actuales podrían utilizar Linux de alguna manera. El sistema operativo es muy conocido y apreciado en la industria del automóvil y su fiabilidad y seguridad están recibiendo cada vez más atención.

Índice
  1. Código abierto, una apuesta segura para la industria del automóvil
  2. ¿Por qué código abierto?

Código abierto, una apuesta segura para la industria del automóvil

La frase “código abierto para la carretera” se ha utilizado para describir la obvia compatibilidad entre Linux y la necesidad de un código altamente personalizable en todo tipo de hardware automotriz. La seguridad de los vehículos que nos transportan de un lugar a otro casi a diario se ha convertido en una seria prioridad. La idea no es nueva. En 2004, Jonathan Schwartz, entonces director de operaciones de Sun Microsystems, sugirió que los automóviles podrían convertirse en plataformas de software, como los teléfonos celulares. Tenía razón. La tendencia ha ido en aumento en los últimos años y, recientemente, ha habido algunos avances claros en este área.

¿Por qué código abierto?

El código abierto desempeña un papel destacado en el uso de Linux en la industria automotriz. Linux es esencial porque se puede ajustar según sea necesario para que se adapte a todo, desde las supercomputadoras más potentes hasta las terminales electrónicas más pequeñas.