Durante una conferencia celebrada en su laboratorio digital 574 en Saint-Denis (Seine-Saint-Denis), la SNCF presentó un panorama de sus desarrollos digitales, detallando en particular 13 proyectos desarrollados en las 7 principales empresas del grupo. El lugar, cuyo nombre evoca el récord de velocidad alcanzado por el TGV, es uno de los 6 centros de innovación digital de la empresa en la región.
"Con estos proyectos, hablamos mucho de industria", insistió Jean-Pierre Farandou, director general de SNCF, en la introducción de su "keynote digital" del 8 de febrero. "Cuando hablamos de digital, vemos mucho del aspecto comercial, en particular con SNCF Connect, pero esto es solo una pequeña parte del iceberg. Lo digital está profundamente arraigado en nuestros métodos operativos, nuestra manera de producir servicios o de gestionar a nuestro personal". Este componente de innovación digital representa 30 millones de euros al año, de un presupuesto total de TI de 2.000 millones de euros (el departamento de TI cuenta con 4.500 empleados).
La oportunidad de la movilidad sostenible
Para el director general, la SNCF se encuentra en un momento decisivo en la historia de su sector de actividad, con la movilidad sostenible de pasajeros y mercancías. "En este contexto, tenemos tres activos", continúa. Para empezar, los clientes quieren viajar, y en este caso viajar en tren. En 2023, el tráfico aumentó un 4% en TGV y un 8% en TER. "El segundo activo es la alineación de los planetas con la voluntad de las autoridades públicas de invertir masivamente en el ferrocarril, como recordó el nuevo primer ministro en su discurso de política general". El director general de la SNCF destacó además que Elisabeth Borne había anunciado en febrero de 2023 el futuro plan de transporte con 100.000 millones de euros de aquí a 2040 para renovar la red y desarrollarla con nuevas infraestructuras, incluidos 2.300 millones de euros adicionales para el mantenimiento.
«Por último, nuestro tercer activo es la madurez tecnológica», añade Jean-Pierre Farandou. «La tecnología digital será decisiva para hacer realidad el rendimiento, la transición ecológica, una mayor eficiencia y un mejor servicio al cliente. Para ello, aprovecharemos todo el potencial de la tecnología, siempre pensando en el cliente. Por ejemplo, estamos trabajando en el mantenimiento predictivo basado en datos e inteligencia artificial, pero siempre con el objetivo de mejorar la regularidad de los trenes».
Smart Station gestiona las alertas de averías en equipos, como ascensores o puertas automáticas, en las estaciones. (Foto SNCF - DR)
Los distintos responsables del proyecto presentaron sus proyectos como si fueran startups que desfilan ante los inversores. Así, en el marco del proyecto Argos, la empresa informatiza progresivamente sus miles de puestos de señalización, que a menudo siguen basándose en tecnologías mecánicas o electromecánicas. La SNCF cuenta con esta transformación para crear cada vez más centros de control centralizados para gestionarlos. Algunos de ellos se han agrupado para ser controlados a distancia. El enfoque también permitirá automatizar la llamada parte de "línea completa", que regula el espaciamiento entre trenes mediante señales luminosas.
"Gracias a la tecnología Argos, ahora podemos gestionar automáticamente el espaciamiento entre trenes identificando la posición relativa de un tren con respecto a otro", explica Gregory Mathieu, director industrial de CCR (control centralizado de la red) y ERTMS (sistema europeo de gestión del tráfico ferroviario) de SNCF Réseau. La información se envía directamente a la cabina del conductor y la infraestructura también puede tomar el control de una máquina para regular su velocidad. La línea Marsella-Ventimiglia es la primera en ser adaptada. SNCF Réseau también ha obtenido una subvención europea de 31 millones de euros para instalar el sistema ERTMS a bordo de 252 vehículos ferroviarios.
5G para mantenimiento
La SNCF también ha implementado robots AMR (robots móviles autónomos) durante dos años. Como en un almacén logístico, se desplazan de forma autónoma para transportar las piezas que deben repararse. Pero el edificio donde operan estos robots estaba cubierto anteriormente por Wi-Fi, lo que limitaba sus movimientos a ciertas partes de la planta. Por eso, la empresa ha equipado su planta con 5G para cubrir todo el edificio, pero también para intercambiar datos sobre las propias piezas, con el fin de identificar errores en las piezas procesadas mediante IA (visión artificial, aprendizaje automático).
Smart Station es, por su parte, un proyecto conjunto entre SNCF Gares & Connexions y Engie. Los equipos como puertas automáticas, escaleras mecánicas, ascensores, etc. están equipados con sensores que envían alertas en caso de avería a un centro de control. La solución ya está instalada en 650 estaciones. En total, se conectarán 6.000 dispositivos en 700 estaciones y se procesarán 800 millones de datos.
La huella de carbono, en el centro de muchos proyectos
La reducción de la huella de carbono es el eje central de varios proyectos de la SNCF. La cuota de la empresa de transportes en el consumo energético de Francia es de hecho del 10%. Su filial SNCF Voyageurs ha presentado un software de conducción ecológica, diseñado a partir de datos de la red (radios de curvatura, estaciones, distancias, características de los equipos, etc.) e instalable en todo tipo de trenes. SNCF Connect & Tech ha desarrollado tres módulos dentro de SNCF Connect diseñados para optimizar el llenado de los trenes y promover la circulación en el transporte público. Para empezar, un sistema de alerta avisa al viajero cuando hay plazas disponibles en trenes llenos. El segundo módulo, JustGo, permite subir a bordo de un TER sin billete y obtener una facturación optimizada en función de la distancia recorrida. Por último, SNCF Voyageurs ha desarrollado la posibilidad de comprar billetes para 30 redes de transporte urbano en la aplicación.
La SNCF ha desarrollado una herramienta para anonimizar las imágenes de videovigilancia. (Foto SNCF - DR)
Siguiendo con el tema de la huella medioambiental, Keolis, filial de la SNCF, también ha desarrollado para las colectividades locales una herramienta de medición en tiempo real de la movilidad de las personas a partir de los datos de su GPS, en todos los modos de transporte. El objetivo: tomar mejores decisiones en cuanto a la organización del transporte. Por último, e-SNCF Solutions ha desarrollado Mon e-Carbone, una calculadora de la huella de carbono para sus empleados.
Anonimización de imágenes de videovigilancia
En cuanto a los servicios a los pasajeros y a los agentes, la SNCF apuesta fuertemente por la videovigilancia. Es uno de los servicios a bordo que ofrece la plataforma S.Dot, junto con la información a los pasajeros y el recuento de personas. 100 trenes TER ya están equipados con este sistema. El sistema borra todos los datos biométricos o personales de los vídeos de las cámaras de vigilancia, dejando únicamente siluetas. La empresa puede así explotar los datos (tráfico, número de maletas, etc.) sin vulnerar la privacidad de sus clientes.
Como es lógico, la empresa de transportes también está incursionando en la IA generativa con SNCF Groupe GPT, basada en la tecnología OpenAI. La herramienta está siendo probada actualmente por algo más de 500 de sus empleados con el fin de identificar casos de uso relevantes. El proyecto evolucionará para integrar imagen, vídeo y voz y SNCF realizará pruebas con otros LLM, como Mistral o Llama.
Una herramienta de traducción automática para los Juegos Olímpicos de 2024
El transporte de mercancías no se queda atrás con Upply, una entidad del grupo Geodis, una plataforma que conecta a las microempresas y pymes con proveedores de transporte para necesidades específicas. "El 85% de las empresas de transporte por carretera en Francia son microempresas", recuerda Thomas Larrieu, director general de Upply. Un transportista que quiera entregar 8 palets de Lyon a Estrasburgo puede encontrar rápidamente un contacto. Todo está calculado, la distancia, el coste, la huella de carbono, etc."
Por último, el grupo está especialmente orgulloso de su motor de traducción automática probado en los smartphones profesionales de sus agentes durante la Copa del Mundo de Rugby. Y, como era de esperar, tiene previsto volver a probarlo durante los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París 2024 este verano. La solución, especialmente entrenada por la SNCF, traduce la pregunta del interlocutor y, a su vez, la respuesta se traduce al idioma del viajero. La empresa está entrenando actualmente su motor en su vocabulario específico (nombres de estaciones, trayectos, tipos de trenes, etc.). Adaptada a 130 idiomas, la herramienta se está entrenando actualmente específicamente con los pocos idiomas de las nacionalidades que estarán más representadas en los Juegos.
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