A finales de diciembre, un estudio realizado por DataCenterHawk descubrió que los centros de datos fueron responsables de más de 1,4 GW de consumo de energía adicional en todo el mundo en el último trimestre de 2023. Otro informe elaborado por la AIE (Agencia Internacional de la Energía) observa una fuerte aceleración de este consumo en los próximos dos años impulsada por la IA y las criptomonedas.

Según la organización, el apetito energético de los centros de datos podría llegar a ser tan alto que su necesidad de electricidad sería equivalente a la de todo Japón, es decir, más de 1.000 TWh en 2026. Para que conste, el consumo de este sector en 2022 será Se estima en 460 TWh (o el 2% de la demanda mundial de electricidad). Además, solo en Estados Unidos, se espera que represente más de un tercio de toda la demanda energética de aquí a 2026. Para Europa, la AIE prevé un paso de 100 TWh en 2022 a 150 TWh en 2026 con la planificación de varias creaciones de centros de datos. . China también participa en esta aceleración para alcanzar los 300 TWh en 2026. Crecimiento impulsado por la demanda de 5G e IoT.

Índice
  1. IA y monedas virtuales hambrientas de energía
  2. Respuestas técnicas y regulatorias

IA y monedas virtuales hambrientas de energía

Pero para explicar este aumento de las necesidades energéticas, la AIE señala a dos culpables: la IA y las criptomonedas. Ambas tecnologías exigen mucho recursos de TI. En cuanto a la IA, “comparando la demanda de electricidad promedio de una búsqueda en Google (0,3 Wh de electricidad) con ChatGPT de OpenAI (2,9 Wh por consulta) y considerando 9 mil millones de búsquedas diarias, esto requeriría casi 10 TWh de electricidad adicional en un año”, explica el informe. Otro elemento, Nvidia, que domina el mercado de aceleradores GPU para cargas de trabajo de IA, ha “entregado 100.000 unidades con un consumo total de 7,3 TWh al año”, desliza la agencia. En este se observa que “en 2026, se espera que la industria de la IA consuma 10 veces su demanda de 2023”.

En el caso de las monedas virtuales, el aumento es menor, pero sostenido. En 2022, esta tecnología utilizó 100 TWh (equivalente a las necesidades de los Países Bajos) y 130 TWh en 2023 (incluidos 120 exclusivamente dedicados a Bitcoin). En 2026, se espera que el consumo de electricidad aumente un 40% respecto a 2022 hasta alcanzar los 160 TWh. La AIE acoge con satisfacción los cambios realizados, en particular, por Ethereum, que ha reducido drásticamente este consumo.

Respuestas técnicas y regulatorias

En su informe, la AIE considera que existen soluciones técnicas y acciones regulatorias para mejorar la eficiencia energética de los centros de datos. En lo que respecta a las políticas, los expertos señalan la Directiva de Eficiencia Energética de la UE que exige que todas las empresas con un consumo de energía anual promedio de tres años superior a 23.600 megavatios hora (MWh) al año mantengan al día un sistema de gestión de energía (EMS) certificado. Otros textos similares fueron tomados en Estados Unidos o China.

En el aspecto técnico, la organización vuelve evidentemente a las mejoras realizadas en la refrigeración de los centros de datos y servidores, que en conjunto representan el 80% del consumo total de un centro de datos. Se destacan la refrigeración por agua, las tecnologías de inmersión, pero también el aprendizaje automático para optimizar las tareas del servidor, con un ahorro de energía del 20%. La AIE incluso menciona “a largo plazo, la computación cuántica asociada a los avances en la refrigeración podría reducir la demanda de energía en el sector” al tiempo que recuerda que hoy la computación cuántica requiere una refrigeración “cercana al cero absoluto”. Un tipo de refrigeración que también objeto de investigación también para la computación cuántica.