En la Cumbre de AI, el 10 y 11 de febrero de 2025 en París, Emmanuel Macron insistió en la importancia de establecer "reglas específicas" y un "marco de confianza" para supervisar el desarrollo de la IA. Entre los países de firma de la figura final, no incorrecta, se encuentran en particular Francia, China, India y Japón, que han defendido la gobernanza global reforzada de la IA a través del "diálogo internacional". Destacaron la necesidad de evitar la concentración excesiva del mercado para que esta tecnología sea más accesible. La administración de Donald Trump, por otro lado, advirtió contra cualquier reglamento.

Índice
  1. Posicionamiento de innovación y seguridad
  2. Un deseo de dominación tecnológica

Posicionamiento de innovación y seguridad

El vicepresidente estadounidense James David Vance, presente en la cumbre, defendió la posición de los Estados Unidos al advertir los peligros de las regulaciones excesivas. Reafirmó el deseo de su país de mantener su liderazgo en el desarrollo de la IA, mientras denunciaba los riesgos planteados por ciertos regímenes "autoritarios". Según él, un marco demasiado estricto, como el previsto por la Unión Europea, ralentizaría la innovación y dañaría la competitividad estadounidense. "La administración Trump asegurará que los sistemas de IA más poderosos estén diseñados y fabricados en los Estados Unidos", dijo, especificando que esta ambición no significaba un deseo de aislamiento. El vicepresidente solicitó el desarrollo sin obstáculos, creyendo que las preocupaciones relacionadas con la seguridad, el medio ambiente o la ética no deberían restringir la innovación. "El futuro no se ganará pensando en la seguridad", dijo, pidiendo a la IA de limitaciones regulatorias para explotar completamente el potencial.

A diferencia de los Estados Unidos, que justifica su posición por la necesidad de fomentar la innovación, el Reino Unido se ha negado a firmar la declaración invocando preocupaciones relacionadas con la seguridad nacional y la gobernanza global. "No tuvimos la impresión de que el acuerdo abordó suficientes preguntas más amplias sobre la seguridad nacional". "Este es nuestro propio interés nacional", dijo el portavoz del gobierno británico. El Reino Unido asegura que esta decisión no haya sido influenciada por Washington, sino que sea exclusivamente de sus propios problemas estratégicos.

Un deseo de dominación tecnológica

JD Vance también destacó la supremacía de los Estados Unidos en el campo de la IA. "Debemos asegurarnos de que Estados Unidos mantenga el avance, de modo que seamos socios de elección para países y empresas", dijo. Este último también enfatizó la importancia estratégica de la soberanía estadounidense en la cadena de suministro de semiconductores, diseñadores de pulgas simples como Nvidia o AMD, para productores como Intel o TSMC. “Tenemos todos los componentes necesarios: dominio de los semiconductores, la potencia informática requerida. Debemos salvaguardar el avance de los Estados Unidos y hacer nuestras papas fritas con nosotros. Esta declaración refleja el deseo estadounidense de mantener el liderazgo en tecnologías futuras.