En un informe publicado a finales de febrero, el Tribunal de Cuentas destaca las limitaciones de la gestión de los recursos humanos en el Ministerio de Trabajo, Empleo e Integración. Estas limitaciones se deben en gran medida a una arquitectura de sistemas de información demasiado fragmentada y a una cultura digital insuficiente en el servicio de recursos humanos de este ministerio que emplea a más de 8.000 personas, el 85% de las cuales en servicios descentralizados. Estas deficiencias se extienden a aspectos fundamentales, como el seguimiento de la fuerza de trabajo, "realizado de manera artesanal, al margen del sistema de información". El Tribunal destaca tanto la falta de restitución automatizada, vinculada principalmente a la mala calidad de los datos presentes en los distintos sistemas, como el retraso en la desmaterialización, en particular de los documentos justificativos de las nóminas, o la fragmentación de la arquitectura del SIRH, que impide cualquier explotación centralizada de los datos.

Para explicar este retraso en comparación con las prácticas vigentes en la mayoría de las organizaciones, los sabios de la calle Cambon se remontan al fracaso de un proyecto emblemático del Estado, el Operador Nacional de Nóminas (ONP). Un proyecto lanzado en 2007 con el fin de centralizar los salarios de los 2,7 millones de funcionarios, pero abandonado en 2014, dejando Una factura considerable de casi 350 millones de eurosLa desaparición de este proyecto central en la modernización de RRHH ha dejado a los ministerios huérfanos, "luchando con sistemas de información obsoletos", escribe el Tribunal en Su informeEste fracaso de la ONP obligó a las distintas administraciones a reescribir su hoja de ruta de SIRH. En el caso del Ministerio de Trabajo, esta se estructura en particular en torno a RenoiRH, un SIRH interministerial desarrollado sobre la base de HRAccess por el Centro Interministerial de Sistemas de Información de Recursos Humanos (Cisirh), adscrito a Bercy. Pero, si hemos de creer las observaciones del Tribunal, el período de incertidumbre que rodeó el fracaso de la ONP y el desarrollo de RenoiRH ha dejado su huella en el Ministerio de Trabajo.

Seguimiento de la fuerza laboral... en Excel

"Entre 2015 y 2022 se han llevado a cabo cinco campañas de verificación de la fiabilidad de los datos. Sin embargo, algunos datos no se han corregido, lo que ha provocado una falta de fiabilidad a la hora de consultar o utilizar RenoiRH", escribe el Tribunal de Cuentas. Destaca en particular la fragmentación de las herramientas utilizadas por el DRH, en paralelo con el SI propuesto por el Cisirh, que multiplica las fuentes de datos. Así, las oficinas de RRHH del ministerio no utilizan la solución de toma de decisiones integrada en RenoiRH, favoreciendo diversas soluciones alternativas. "Tanto es así que actualmente todo el seguimiento se realiza en Excel, de manera artesanal, independientemente del SIRH. El mejor ejemplo de ello es el fichero de seguimiento de los puestos de trabajo y de la plantilla, llamado 'fichero MSK', que consiste en la agregación por parte del DRH, una vez cada dos meses, de 92 ficheros rellenados a mano por los servicios de RRHH locales. No se hace ninguna comparación entre este fichero y los datos de RenoiRH para garantizar la calidad de los datos", prosiguen los sabios, que piden al ministerio que ponga remedio a esta situación convirtiendo la herramienta de gestión de RRHH en la base de los análisis que garanticen el seguimiento de la actividad. La observación es similar en el seguimiento de la gestión del tiempo de trabajo y de las vacaciones de los agentes o en el del teletrabajo, también asegurado en varias herramientas que no se comunican entre sí.

El Tribunal, que destaca la debilidad de la cultura digital en este ministerio y, en concreto, en su DRH, le pide que defina una hoja de ruta digital que priorice la fiabilidad de sus sistemas de información y la formación de los agentes en tecnología digital. Y que haga campaña por un uso más amplio de las herramientas desarrolladas por el Cisirh. "Es importante que el DRH esté más implicado que hoy en el comité de dirección interministerial de RenoiRH, organizado mensualmente por el Cisirh, así como en los distintos grupos de trabajo. De este modo, podrá influir en la evolución de esta herramienta interministerial para que se tengan en cuenta las necesidades de los usuarios y se apliquen las medidas correctivas necesarias", escribe la rue Cambon. Una forma de poner de relieve la falta de inversión por parte del ministerio en una herramienta que, sin embargo, debería estar en el centro de sus procesos de RRHH. En su respuesta al Tribunal, el Ministerio indicó que había comenzado, en otoño de 2022, a redactar una hoja de ruta del SIRH para el periodo 2023-2027.