Europa, campeón mundial de regulación, sigue siendo paradójicamente completamente dependiente de los principales proveedores estadounidenses para sus soluciones de TI. Desde software hasta servidores, a través de la nube y los terminales, el antiguo continente evoluciona en un ecosistema dominado en gran medida por actores como AMD, Amazon, Broadcom, Google, Intel, Qualcomm, Microsoft, Intel o Nvidia. Estas preguntas de la realidad: ¿Cómo puede un poder económico líder depender masivamente de tecnologías extranjeras? De acuerdo con nuestros cálculos basados en cifras de aduanas francesas, en 2024, las importaciones de los EE. UU., Sin contar, los flujos que vinieron directamente de Asia, alcanzaron casi 1.05 mil millones de € todos los sistemas informáticos y componentes combinados (memoria, almacenamiento, chips, pantallas, tarjetas electrónicas, circuitos impresos ...) excluyendo el equipo de telefonía.
Cuando Estados Unidos ha impuesto sus estándares y capturado la mayoría de las inversiones de I + D, Europa no puede alinear a los campeones distintos de Arm, ASML, Dassault Systèmes, SAP, Schneider, Siemens o Infineon. Los recién llegados como Mistral todavía tienen todo que demostrar. La ausencia de una nube soberana viable, la marginación de sus jugadores en semiconductores avanzados y la dificultad para emerger en el mercado de software corporativo se traduce Un retraso estratégico inquietante subrayado por el reciente informe Mario Draghi. La independencia tecnológica de Europa no puede ser decretada, se construye. Al igual que la defensa.
Otras noticias que te pueden interesar