Este fin de semana, el gobierno ha dado un paso al frente en el caso Atos. Tras considerar varias opciones durante La presentación del plan de refinanciación el 9 de abrilEl Ministro de Economía ha decidido presentar una propuesta sobre las actividades relacionadas con la defensa de la SSII. En una entrevista concedida el domingo a LCI, afirmó que había enviado una carta de intenciones en este sentido a través de la agencia de participación estatal. Para conocer los detalles del alcance de las actividades en cuestión, es necesario consultar al comunicado de prensa de Atos quien toma nota de este anuncio con satisfacción.

Por tanto, se trata del "100% de las actividades de Advanced Computing, Mission-Critical Systems (MCS) y Cybersecurity Products de la división BDS (Big Data & Cybersecurity)". El Estado quiere así exfiltrar áreas sensibles del paquete de compradores. Los superordenadores (de la adquisición de Bull) en el marco de la adquisición de Advanced Computing son necesarios para la simulación de pruebas nucleares o la gestión de la flota de centrales nucleares de EDF. La rama MCS incluye las comunicaciones para los aviones Rafale, el programa Scorpion, pero también la empresa Avantix (antes conocida como Amesys y especializada en escuchas clandestinas). Por último, la rama de productos de ciberseguridad integra varias soluciones de cifrado, gestión de identidades, seguridad post-cuántica, etc.

Presionando a Thales o Airbus para que se posicionen

El valor de este grupo se estima entre 700 millones y 1.000 millones de euros, con 4.000 empleados, principalmente radicados en Francia. Para Bruno Le Maire, el Estado no quiere estar solo en este arreglo y quiere contar con el apoyo de los industriales. El ministro mencionó, sin nombrarlos, "grupos cercanos a las actividades de Defensa o aeronáutica", en particular Thales o Airbus. El objetivo es evitar, según él, que "las actividades soberanas caigan en manos de actores extranjeros y sean gestionadas por Francia".

La salida de Bruno Le Maire también se produce en un contexto muy difícil para Atos. La semana pasada, el grupo advirtió que sus previsiones de plan de negocio hasta 2027 eran mejores de lo esperado. Como resultado, está buscando financiación adicional, nada menos que 1.100 millones de euros (una cifra revisada al alza en el comunicado de prensa del 29 de abril). No es suficiente para tranquilizar al gobierno, sobre todo con el temor de ver a los fondos activistas (hedge funds) ganar terreno. Con el compromiso del Estado, la acción deAtos Los mercados bursátiles van recuperando algo de color a la espera de la presentación de ofertas públicas de adquisición previstas para el próximo 3 de mayo.